sábado, 31 de enero de 2015

?¿?

Ahora me encontraba en un pasadizo, bajo un mar sin peces, donde las medusas no eran estrellas. Estábamos en el centro del Mar Mediterráneo, pero justo, justo en el centro. Un típico cartel de usted está aquí hacía nuestra localización tan obvia que parecía un insulto dudarlo.
Estábamos esperando a un vuelo, aunque al principio yo no sabía éso, e íbamos hacia Creta, pero no era Creta lo que mis ojos veían, era el país de Estanbul, con la forma de una pequeña isla que tampoco era Creta. 
Y hacia allí me dirigía. Yo, junto a... ¿Un chico? Éramos famosos. Nos perseguían, se peleaban por nuestro autógrafo ¿qué les había hecho yo?, huía. Se darían cuenta. 
Pero entonces nos bloquearon el camino. Estaba con... ¿Otro chico? Y teníamos que huir de Mango, de una tienda, que ni recordaba. Estábamos en pleno epicentro de una pelea entre Europa y Amazon. Y todo tenía algún sentido. Y yo huía, desconcertado.
Huía, en picado.
Entonces llegamos a una sala. Ahora volvíamos sobre nuestros pasos. Esta sala nos informaba de que nuestro vuelo estaba atrasado, y Chico 2 empezó a buscar trabajo: había pedido algo en Amazon. 

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Nota: solo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.